Liberan a Terrorista: Cuando la ética y la justicia son ignorados

La jueza Kathleen Cardone, de la Corte Federal de El Paso, Texas, concedió el pasado 9 de abril, la libertad condicional bajo fianza a Luis Posada Carriles hasta el 11 de mayo, cuando le celebren el juicio por fraude migratorio. El fallo judicial es otra confirmación del doble rasero del gobierno de George W. Bush en su alegada cruzada contra el terrorismo: se niega a procesar a Posada por sus crímenes de lesa humanidad, mientras mantiene en prisión a Cinco luchadores antiterroristas, quienes cumplen largas e injustas sentencias.
Cuando la injusticia impera los pueblos se manifiestan, se exaltan. Así ocurrió en la noche de ayer en la zona 94 de los Comités de Defensa de la Revolución en la provincia de Cienfuegos.
Cederistas, federadas, combatientes, pioneros expresaron su condena a la vil acción de la jueza y reclamaron que se respeten las leyes y se imponga la justicia. Una sola era la pregunta: ¿cómo van a dejar libre a un asesino? Y respondían que le han faltado el respeto a las madres de los jóvenes norteamericanos que han perdido la vida en la cruzada de los Estados Unidos contra el terrorismo; a las madres de los jóvenes cubanos que murieron en la voladura del avión de Barbados; a Justino Di Celmo, que perdió a su hijo en un hotel de La Habana por una bomba que Posada mandó a poner allí; a la dignidad, a la justicia, a la honradez, a la decencia.
Orestes Llanes Mestre, coordinador provincial de los CDR al resumir el acto refirió que era en extremo peligroso que este asesino a sueldo ande libre. "Ya una vez se escapó de las cárceles de Venezuela con la ayuda de los Estados Unidos, de sus amigos mafiosos de Miami, y ahora pretenden hacerlo escapar de la justicia norteamericana. ¡Cuidado, mucho cuidado con la orden de libertad condicional en una residencia de Miami! El objetivo es más que claro, quieren sacarlo de Estados Unidos, no nos asombremos si mañana nos dicen que está fuera de ese territorio, en una isla en el Pacífico. Que le aprieten bien el dispositivo electrónico que le van a poner porque no lo van a encontrar.
"Es absurdo lo que han hecho, juzgar este hombre como violador de la política migratoria de los EU que implica solamente una multa, la cual pagará con el dinero de la mafia anticubana, con el dinero sucio y manchado de sangre como sus propias manos, y no lo juzgan por lo que es verdaderamente, ahí es donde está la doble moral del gobierno de Bush, liberar a terroristas y mantener prisioneros a quienes luchan contra el terrorismo, como es el caso de nuestros cinco hermanos. Ahora dicen que el asesino de muchos está enfermo, y todos sabemos que sí, lo está, pero hace más de 50 años que tiene el alma enferma de terrorismo, reconoció cada uno de sus crímenes", manifestó Llanes.
Y los puños se crispaban por la ira, la impotencia de no poder hacer nada, a la vez las exclamaciones de ¡justicia!, ¡envíenlo a prisión por sus crímenes!, ¡no queremos más familias enlutadas por los asesinatos de Posada!, ¡libertad para nuestros cinco hermanos!, se escuchaban una y otra vez en el auditorio. Y así será en cada acto en las cuadras, en los centros de trabajo y de estudio, porque no se descansará hasta que la ética y justicia ya no sean ignoradas